El tráfico ilícito de bienes culturales es considerado en la actualidad el cuarto tráfico de mayor importancia en la región después del de Armas, Drogas y el tráfico de Personas. Debido a este grave delito, que perjudica al acervo cultural de la nación, es necesario apoyar procesos de sensibilización y concienciación sobre la protección, conservación y recuperación de los considerados bienes culturales.
Los objetos culturales, como las tallas tradicionales, la cerámica y las antigüedades, son atractivos como regalo, pero asegúrate de no comprar, sin saberlo, bienes robados, extraídos de manera ilícita u obtenidos de saqueos. Todos los días, innumerables sitios y monumentos en el planeta son víctimas de pillajes que despojan a los pueblos de su pasado. Redes de delincuencia organizada específicas transportan y venden estos bienes. El impacto de estos actos puede ser irreversible y arrebatar a países y ciudadanos su patrimonio y su identidad cultural. Asegúrate de que los souvenirs que te llevas a casa tengan un historial documentado y legal, que no sean objetos robados y que tengan permiso de exportación. Pregunta por el origen de lo que estás comprando y piensa siempre en la riqueza de la historia y el patrimonio de tu propio país y en cómo te sentirías si te lo arrebataran.